Ha sido la mejor noticia del año que nos deja: gracias a la reforma del artículo 49 de la Constitución, todas y todos somos personas iguales con los mismos derechos ante la ley y debemos contar con los apoyos necesarios para poder ejercerlos y hacer frente a las obligaciones que comportan. El término “disminuido” ya está en el baúl de la historia. Ocurrió el 15 de febrero y el Congreso lo aprobó por 312 votos a favor y 32 en contra.
Tal cambio, así como el fin de la incapacitación judicial que le precedió en 2021, están ayudando de manera decidida a fortalecer la red de convivencia que vamos creando en Fundación Amanecer a través de su Centro Ocupacional de Formación, Oportunidades e Inserción Laboral, entre personas con discapacidad, familias, técnicos y voluntariado.
Una red que, en este ejercicio, se ha enriquecido y reforzado con nuevos hilos, que gana densidad gracias a conceptos como sostenibilidad o con proyectos como el de acompañamiento a la vida afectiva y sexual, la formación de mujeres en competencias digitales o el programa de envejecimiento. Una red que crece con las nuevas propuestas que aportan los distintos espacios que se están creando, así como planes y formaciones asociadas a la vida independiente o la capacidad jurídica.
Emprenderemos la aventura de 2025 sin Antonia Ruiz y Maite Galán, gente querida que ha dejado de estar entre nosotros. Nos queda la vivencia compartida que reverdece con la incorporación de personas como Patricia, Santiago o Miguel Ángel. Llega un año de retos en el que deberemos seguir reforzando la red de apoyos, convivencia, derechos e igualdad que, juntos, forjamos día a día.
Que estas fechas os sean propicias para todo lo que queráis emprender.
¡Feliz 2025!
